Las instalaciones fotovoltaicas, al igual que el resto de las instalaciones eléctricas deben protegerse para mantener la seguridad tanto de los equipos que la conforman, como de las personas que tienen acceso a ella.
Las características técnicas de dichas instalaciones hacen necesario el uso de equipos específicamente diseñados para esta aplicación.
La corriente continua que generan los paneles fotovoltaicos requiere de un tratamiento especial y para ello se dispone de diferentes equipos de protección.
El seccionador no polarizado para instalaciones fotovoltaicas de una intensidad nominal de 16 a 32A con una tensión de trabajo: 250Vdc (1P), 500Vdc (2P), 750Vdc (3P) y 1000Vdc (4P).
Según la norma IEC EN 60947-3
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